La siguiente actividad consiste en aprender a jugar al popular juego de dominó ¡Pero con fracciones! Para que los alumnos se involucren de manera más significativa en el aprendizaje, el dominó puede realizarse desde cero con la supervisión del profesor, solo necesitaremos cartulinas de colores, tijeras, pinturas y muchas ganas de pasarlo bien.
Si por el contrario no tenemos tiempo, siempre podemos buscar en Internet una plantilla de dominó, en la red hay muchas y cubren un espectro muy alto de dificultad.
Se pueden realizar varias modalidades de juego, nosotros
hemos optado por dos "El Solitario" y "El Duelo bajo el Sol".
En "El Solitario", el jugador se divierte mientras repasa las fracciones, él tiene todas las tarjetas y tiene que unir en el menor tiempo posible cada dibujo con su representación numérica.
Una vez que hayan realizado un par de veces "El Solitario", estarán preparados para realizar "El Duelo bajo el Sol", en esta modalidad se dividen las cartas con un compañero y realizan el juego de emparejar cada representación gráfica con cada representación numérica, el que se quede sin cartas primero gana.
Testimonio: Eran dos juegos de dominó, eran 21 cartas.
El primer juego fue divertido, era que tuve que jugar solo y juntar cada fracción y fue divertido, tardé 11 minutos.
El segundo juego de fracciones nos dividimos las cartas e hicimos un combate de cartas de fracciones y me gustó. Y lo que me gustó más es jugar con mi compañero Javier porque es majo y divertido. Me gustó porque me gusta jugar con la gente.
Me gustaría hacer esta actividad en clase, hoy he aprendido a jugar al dominó y a repasar las fracciones.
¿Por qué hemos hecho esta actividad?
Por mucho que lo intentemos y nos
empeñemos en ello, los niños no están hechos para estar sentados en sus
pupitres atendiendo a lo que dice el profesor, sin lugar a duda ese método
funciona durante una horquilla de tiempo, pero al final se acaban dispersando
evadiendo.
Durante muchos años se ha pensado
que esto era un problema, sin embargo el gran Abraham Lincoln dijo “Un problema
no es más que una oportunidad disfrazada” ¿Quiénes somos nosotros para
contradecirle?
Está totalmente demostrado que
generar interés en el alumno contribuye a un aprendizaje más significativo ¿Y
qué interesa más que un juego?
Además estas actividad lúdicas
rompen completamente la dinámica y la monotonía de la clase y ayuda al alumno a
liberarse del estrés de las clases, los deberes…
Además de pasar un rato
divertido, la actividad del dominó es idónea para repasar las fracciones tanto
en su versión gráfica como en su versión numérica.
Por otro lado, pocas cosas gustan
más a los alumnos que una buena competición, desde pequeños son competitivos y
les gusta superarse, por lo que desde actividades como esta podemos aprovechar
para trabajar valores transversales como el respeto, la deportividad y el juego
limpio así como el saber ganar y el saber perder, poniendo énfasis en que lo
capital no es hacer “El Solitario” en tres minutos ni machacar al compañero en “El
Duelo bajo el Sol” sino hacer la actividad de forma correcta y aprender.
Los resultados académicos de
nuestro país en el área de matemáticas son deplorables, todos lo sabemos, todos
lo denunciamos, pero luego nadie hace nada para cambiar el modelo,cuando
Einstein decía “La locura es hacer lo mismo siempre esperando diferentes
resultados” no le faltaba razón ¿Estaremos volviéndonos locos en España?
Es probable que si paulatinamente
vamos introduciendo actividades de este tipo en las aulas, consigamos que gran
parte del alumnado no tenga aversión a una de las materias más importantes que
van a cursar durante toda su vida, las matemáticas.
Firmado:
Javier Yanguas Moreno.
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